Esta exposición está organizada por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Agüimes, la Consejería de Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo de Gran Canaria y la Biblioteca Insular de Gran Canaria.
Las personas interesadas pueden visitar la exposición hasta el domingo 31 de octubre en horario de nueve de la mañana a dos de la tarde y de dos y media a cinco de la tarde.
“La exposición Pancho Guerra y su época es el homenaje a un escritor canario, abanderado de la cultura de su tierra, admirador profundo del carácter de sus gentes y personaje singular amante del arte y del buen vivir.
Francisco Guerra Navarro (San Bartolomé de Tirajana 1909 - Madrid 1961), popularmente conocido como Pancho Guerra, fue un hombre profundamente interesado en todo aquello referente a las expresiones populares y manifestaciones del pueblo llano. Esta faceta de recopilación de la cultura de las gentes de los ricos capitalinos o de los oriundos de su pueblo natal, se plasmo con la creación de un personaje que ha pasado a formar parte de la mayoría de los hogares familiares de esta isla. Pepe Monagas, ese canario socarrón cuya mayor preocupación era disfrutar de la vida y tomarse un pizco con sus amigos, fue el máximo exponente literario del costumbrismo canario y es imposible disociar al creador de su personaje.
Los Cuentos Famosos de Pepe Monagas o Las Memorias de Pepe Monagas, son referentes culturales para nuestra isla.
Pero quizás la obra más representativa de este culto por las cosas populares, sea el Léxico Popular de Gran Canaria, obra que el ilustre escritor dejo inconclusa debido a su repentina muerte.
Junto a esta faceta conocida de Pancho Guerra, se le debe sumar la maestría que tuvo su pluma a la hora de narrar, como periodista, los sucesos de la Audiencia madrileña, que bien le valió el Premio Nacional Manuel Tercero.
Pero Pancho Guerra no era hombre de hermetizarse tras una pluma y un papel. Gustaba de todas aquellas expresiones artísticas, bien fuesen artes plásticas, teatro o revistas musicales. En estos dos últimos campos, nos dejó como legado las adaptaciones teatrales de las novelas Nada., de Carmen Laforet, y La Umbría de Alonso Quesada; la puesta en escena e interpretación de uno de los personajes de La Sirena Varada de Alejandro casona y como no, la revista Tipitín, muy aclamada en su época.
Su amistad con los grandes artistas de la primera generación de la escuela Luján Pérez, en especial con Santiago Santana, hizo que la unión entre la literatura y las artes plásticas a principio del siglo XX, fuera una magnifica simbiosis que dio como resultado la exaltación de la cultura de nuestra tierra.
Se invita al visitante a retroceder en el tiempo y navegar por ese ambiente cultural tan rico y variopinto, donde la incipiente vanguardia artística ya se vislumbraba en nuestra isla y que el estallido de la guerra civil no hizo más que ralentizar su ritmo y defenestrar todas aquellas esperanzas de libertad, dinamismo y modernidad.
La Escuela Luján Pérez, presente en esta muestra a través de las obras de Felo Monzón, Santiago Santana, Jorge Oramas, Plácido Fleitas, Eduardo Gregorio y Juan Jaén, marcó un hito en el desarrollo de los movimientos artísticos enmarcados en la vanguardia de nuestra isla. Sus obras expresan el valor y la admiración que tuvieron estos artistas por la cultura, la gente y el paisaje de su terruño.
La relación que mantuvieron estos artistas con el escritor, fue muy estrecha y en algunos casos muy íntima. Hubo colaboraciones muy importantes entre ellos, de hecho, Francisco Guerra Navarro adoptó el nombre definitivo con el que firmó sus obras más importantes, durante la primera exposición de estos pintores y escultores allá por el año 1929.
La unión entre literatura, artes plásticas, teatro, musicales, costumbrismo y cultura popular, convergen en esta exposición que retrata el tiempo y la época en la que nuestra isla vivió el despertar de la modernidad y tuvo una gran conexión con las vanguardias europeas".
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